Día Del Sagrado Corazón
Sagrado Corazón
El día del Sagrado Corazón de Jesús, en la Iglesia Católica, es una fiesta dedicada a honrar al Sagrado Corazón de Jesucristo. Se celebra el viernes, octavo día después de la fiesta del Cuerpo y Sangre de Cristo y el duodécimo día después del Día de la Santísima Trinidad.
El corazón de Cristo es un símbolo del amor de Dios por las personas, por tanto, este día se le refleja gratitud al Señor por su amor y la salvación otorgada.
Historia Del Día Del Sagrado Corazón De Jesús
El origen de la festividad se remonta a los siglos XI XII. El culto al Sagrado Corazón de Jesús comenzó con la veneración de las Llagas de Cristo, que se generalizó en el siglo XIII, cuando los monjes dedicaron oraciones especiales, destacando el costado traspasado del Salvador.
Una especie de impulso para el desarrollo de la veneración al Corazón de Jesús fueron las visiones de la monja del monasterio francés Pore le Monial Marguerite Maria Alacok, a quien Jesucristo se le apareció más de una vez, expresándole su deseo de que la gente venerara a su corazón de una manera especial.
Sin embargo, este deseo permaneció incumplido durante mucho tiempo; muchos teólogos dudaban de la necesidad de establecer una nueva veneración de toda la iglesia.
En el siglo XVI, especialmente gracias a la orden de los jesuitas, el culto al corazón de Jesús alcanza su punto culminante. En 1672, John Ed, el confesor de Margaret Maria Alakok, celebró con el permiso del obispo la primera santa Misa en honor al corazón del Señor Jesús.
La Iglesia Católica ha retrasado el establecimiento oficial de la nueva fiesta durante cien años. El primer permiso fue recibido por los obispos polacos del Papa Clemente XII en 1765.
El día ha sido celebrado por la Iglesia en todo el mundo desde el siglo XIX. En 1856, el Papa Pío IX introdujo la celebración litúrgica del Sagrado Corazón de Jesús como obligatoria para toda la Iglesia.
León XIII profundizó la comprensión de la dedicación al Sagrado Corazón, ilustrando la relación entre su veneración y la salvación del mundo.
En 1956, el Papa Pío XII, en su mensaje con motivo del centenario de este acontecimiento, dio un sólido fundamento dogmático a la veneración del Corazón de Jesús.
En los servicios de la Iglesia Católica en esta festividad, se recuerdan aquellos pasajes de la Sagrada Escritura, que habla de Cristo como buen Pastor, que calienta a la oveja descarriada con el calor de su corazón, y también lee un fragmento del Evangelio de Juan, sobre la perforación del costado de Jesús.
Tradiciones De La Santa Iglesia Para Conmemorar El Día Del Sagrado Corazón De Jesús
En este día, en la Iglesia Católica, los Santos Dones, que son adorados, se exhiben en el altar.
Después de la Comunión, se lee una oración, en la que se expresa la petición de que el Corazón de Jesús, en el que el mundo revela la verdadera naturaleza de Dios, enseñe a las personas a ver a Cristo en los hermanos.
El corazón de Jesús fue traspasado en la cruz y se convirtió en la fuente de los sacramentos de la Iglesia. De él brotaron sangre y agua, lo que indica el Bautismo y la Eucaristía, sin los cuales es imposible llevar una vida recta y comunicarse con Dios.
La siguiente pereza después de la festividad, el sábado, los católicos honran al Inmaculado Corazón de María, que era la imagen y semejanza perfecta del corazón de su hijo.
Historia De Las 12 Promesas
Según las costumbres antiguas, estas son las 12 promesas para quienes honran al sagrado corazón de Jesús de una manera especial:
- A los que honran mi sagrado corazón, les concedo la gracia y la ayuda necesarias, de acuerdo con las circunstancias de su vida.
- En sus familias, estableceré y mantendré la paz.
- Los consolaré en cualquier dolor.
- Seré un refugio seguro en la vida y especialmente en la hora de la muerte.
- Derramaré abundantes bendiciones sobre todos sus trabajos y empresas.
- Los pecadores encontrarán en mi corazón una fuente inagotable de misericordia.
- A través de esta forma de piedad, las almas tibias se volverán celosas.
- Las almas celosas alcanzarán rápidamente las alturas de la perfección.
- Mi bendición será donde se honre la imagen del sagrado corazón.
- A todos los que trabajan por la salvación de las almas, les concedo la gracia de convertir hasta los corazones más duros.
- Los nombres de aquellos que propagan esta forma de piedad quedarán grabados para siempre en mi corazón.
- A todos los que reciben la comunión el primer viernes durante nueve meses seguidos, les concedo la gracia de mantener la fe hasta el final y recibir la salvación eterna.
Estas promesas de Cristo llenan de esperanza el corazón de todo cristiano. Al tratar de estar a la altura de estas promesas, adquirimos el tesoro más importante de la Iglesia: el Amor del Sagrado corazón, el corazón que fue traspasado, asesinado por nuestros pecados. El corazón que vive y late, anhelando recibir nuestro amor por él.